Es claro que Antonio Taveras ha sido un excelente senador pero ha cometido errores mediáticos importantes que hasta hoy, repercuten… y crean un perfil injusto de inactivo, vulnerable que en debates o exposiciones logra convencer de una vez.
Antonio ha sido un propulsor de planes en la provincia Santo Domingo que en años, se estancaron, como por ejemplo, aprobar un plan de desarrollo y luchar con el tema de las titulaciones y abusos de invasiones, lucha interminable y muy compleja pues durante años, en los que precisamente estuvo Cristina, nada se hizo, se incrementó el desorden de la tenencia de la tierra y se permitió la corrupción galopante.
El senador ha detenido muchas situaciones adversas al ciudadano pero se olvidó, de promocionarlas y hoy, que quiere otros periodo, permite llegar el clichet de que no ha hecho nada.
Sin embargo, los males que hoy Antonio trata de corregir y lo mantiene ocupado fueron creados y fomentados durante los gobiernos de Cristina Lizardo quien hoy quiere regresar a donde hizo poco o nada, la silla senatorial.
Es claro que la opción de Ruben Maldonado era fresca, potable, diputado que fue presidente por un año del hemiciclo y, de tu a tu, podría haber competido con Antonio, pero Cristina no lo dejó pasar.
Se sabe que para las elecciones del 2016 el fenecido Juancito (Juan de los Santos) había acordado que por la enfermedad de Cristina y sus ganas de ascender, ya no quería ser alcalde y soñó, ser senador. habló incluso con Manuel Jiménez, pero Danilo le dijo a Juan, que ni vivía ya en Santo Domingo Este: «Es Cristina la que va» y el alcalde tuvo que recular, dolido, meses antes que por desgracia, la muerte le tocara.
Karen Ricardo me advirtió, a una pregunta si ella aspiraría, que con lo «mal que lo había hecho Antonio», cualquiera le ganaba sin embargo, ni ella pudo sacar la cabeza porque mientras Cristina aspire nadie más podrá, desde esos partidos, a querer la candidatura.
Hoy llega pero ni reciclada incluso, incapaz de exponer logros en mas de una década de gestión y Antonio, con aun pésima prensa, no logra capitalizar del todo la debilidad pues recordar que fue «expulsada» del poder.
Es claro que Karen, con su juventud y algunas debilidades pero muy capaz, «virgen» en lo que a senadora se refiere, o Maldonado, habrían sido contendientes dignos de una competencia contra Antonio que tiene en poco tiempo, muchos logros que mostrar, pero mientras Cristina opte, el resto, que se arrincone, así le espere una derrota humillante en las elecciones que ya llegan
